Joan Alcover i Maspons |
Joan Alcover i Maspons nació en Palma, en 1854. En el Instituto Balear fue condiscípulo del poeta Miquel Costa i Llobera, Joan Lluís Estelrich y el político Antonio Maura y tuvo de profesor al poeta romántico José Luis Pons y Gallarza. En 1869 comenzó la carrera de Derecho en Barcelona, donde entró en contacto con el movimiento de la Renaixença. Se licencia en Derecho Civil y Canónico en 1878 y se instala definitivamente en Mallorca; se casó con la barcelonesa Rosa Pujol, y comenzó a ejercer de abogado. Ingresó en las filas del partido liberal de Antoni Maura, amigo personal desde los años de estudiante. En 1879 es elegido concejal del Ayuntamiento de Palma y, entre 1883-86, ocupa el cargo de diputado provincial por Manacor. La cumbre más alta de su carrera política la consigue en 1893, cuando sale elegido diputado a Cortes, por el mismo partido. Después de una temporada muy corta en Madrid, donde asiste a unas cuantas sesiones, y a pesar de ser un orador unánimemente reconocido, vuelve a Mallorca. Así, decepcionado y desencantado de la política en la experiencia como diputado a Cortes, -le desengañó el ideario maurista- poco a poco se fue alejando del Partido Liberal, a pesar de mantenerse siempre fiel a la amistad que le unía con Antonio Maura. Es una muestra el poema, «El enebro», que dedica al político cuando éste se encuentra en un momento crítico de su carrera.
Progresivamente, la ideología política de Alcover evoluciona hacia un catalanismo de derechas, próximo a la Lliga Regionalista de Cataluña. Paralelamente a la carrera política, inició la carrera literaria que, en principio, alternaría en catalán y castellano. Publicó sus primeros poemas en 1872, y cinco años más tarde, en 1877, ganó un premio extraordinario en los "Jocs Florals de Barcelona" por el poema «La Cruz». En 1887 comienza la tragedia personal de Joan Alcover. Muere su esposa Rosa Pujol y años más tarde, dos hijos: Teresa, de tuberculosis (1901), y Pedro, de tifus (1905). Entre 1887 y 1901 publicó libros de poemas sólo en castellano, algunos de los cuales insinúan las posibilidades creativas que se hicieron patentes más adelante, en los poemas en catalán. Con la experiencia del dolor por la pérdida de la mujer y los hijos redescubrió la lengua propia como herramienta de expresión de los sentimientos.
Joan Alcover (a la derecha) en el jardín de su casa, acompañado de unos amigos, entre ellos (de pie) Miguel de los Santos Oliver (Archivo Vda. de D. Pau Alcover)
Se inicia, entonces, la metamorfosis de el hombre y del escritor. La poesía más trivial de los años anteriores da paso a otra más íntima y sincera, para la que no le sirve tampoco, como vehículo de expresión, una lengua en la cabeza y al cabo ajena. Ahora es el poeta de la sinceridad, y la literatura se convierte en el único instrumento válido para expresar su dolor. El cambio idiomático, que se produce más o menos entre 1899 y 1903, contribuyen seguramente otros factores, como el poco eco logrado como escritor en castellano y por el contrario, la buena acogida de su obra catalana tanto aquí en Mallorca como en Barcelona. Debemos tener presente la influencia del contexto cultural del momento y los consejos de amigos como Miquel Costa, Gabriel Alomar, Santiago Rusiñol y Miguel de los Santos Oliver, el grupo modernista del que tuvo un gran impacto en Palma y que propugnaba la integración en la cultura catalana.
Asimismo, las campañas idiomáticas del padre Antoni M. Alcover y su éxito inesperado de unos poemas catalanes hechos por encargo («La sierra», homenaje a Miquel Costa i Llobera, y "La reliquia", petición de Santiago Rusiñol para un álbum) le motivaron a continuar la producción poética sólo en catalán. Todo ello, convierte Alcover en defensor encendido de la lengua catalana en la expresión literaria. En 1903 hizo la lectura pública de "La Balanguera", que en un significado doble -directo y simbólico- habla del paso del tiempo que conlleva la perennidad de la vida civil frente a la fugacidad de la vida personal. Participó en las conferencias que los intelectuales mallorquines hicieron en el Ateneu Barcelonès (1904) y en el Primer Congreso de la Lengua Catalana (1906). Fue miembro correspondiente de la Real Academia Española (1904) y de la Academia de Buenas Letras de Barcelona (1913). En 1905, año en que moría su hijo Pedro, concurrió en los Juegos Florales de Barcelona. También concurriría el año 1907 y el 1909, en que fue proclamado maestro en "gai saber".
Joan Alcover, en la foto conmemorativa del Primer Congrés de Llengua Catalana, del año 1906
El último cuarto del siglo XIX, junto a los escritores que se han adherido al movimiento de la Renaixença (movimiento catalán de resurgimiento cultural que se inició en el Principado en la primera mitad del siglo XIX y con el que se abre el periodo contemporáneo de la literatura catalana), que escriben en catalán y que participan en los Juegos Florales, en Mallorca hay un grupo más reducido de literatos que utilizan el castellano en sus composiciones y que pretenden triunfar en los escenarios madrileños. Es en este contexto que Joan Alcover comienza a publicar, a partir de 1872, los primeros poemas, en catalán y en castellano, en las revistas Museo Balear, Revista Balear y en El Isleño. Más tarde, influido por mosén Alcover y Santiago Rusiñol, entre otros, se decanta por la escritura sólo en catalán. Joan Alcover es, junto con Miquel Costa i Llobera, uno de los padres indiscutibles de la Escuela Mallorquina, caracterizada por una poesía vinculada a los clásicos griegos y latinos, como también a la tradición poética propia de la zona, y con cierta vinculación con el Romanticismo, Neoclasicismo, costumbrismo, Naturalismo, Modernismo y Novecentismo. Joan Alcover, referente emblemático de las generaciones posteriores, tiene el mérito de haber logrado modernizar la literatura en Mallorca y haber renovado la estética de los Juegos Florales, usando, para ello, una lengua culta y depurada, alejada de todo proceso dialectalitzador.
Esta era la sala de tertulias en la casa de Alcover
En 1919 recibe el premio Fastenrath y, ese mismo año, en el mismo día, en Barcelona y Mallorca respectivamente, mueren sus hijos Cayetano y María, hija de su segunda esposa María de Haro y Rosselló, con quien también tendría Paz , el único de los hijos que sobreviviría a su padre. A partir de estas desgracias, las nuevas composiciones poéticas escasean ya menudo se concretan en reelaboraciones o traducciones de piezas anteriores. A partir de 1895 y hasta 1920, cada domingo por la tarde, excepto los meses de verano, Joan Alcover organizaba en su casa una tertulia. En esta misma sala -o en el jardín, cuando el tiempo lo permitía- se reunían prestigiosos escritores, artistas e intelectuales, de generaciones, de ideologías y de formación diversas. La conversación amiga se mezclaba con la discusión sobre libros, la lectura y el comentario de textos inéditos. Quedaba manifiesto el papel de mentor que Joan Alcover ejercía sobre la futura generación de la Escuela Mallorquina. Estos encuentros también eran relevantes porque, por un lado, con la presencia frecuente de personajes como Santiago Rusiñol y más tarde Josep Carner, se establecía un puente cultural entre el Principado de Cataluña y Mallorca y, por otro, porque aquí se daba acogida a los intelectuales de las más diversas procedencias que visitaban la isla de Mallorca.
Principio de los años veinte. Con motivo de una exposición de pintura de Anglada Camarasa en el club Social de la Veda y posterior ágape en el Hotel Mediterraneo.
En las tertulias asistieron, entre otros muchos, los siguientes intelectuales:
• Gabriel Maura (Palma 1842-1907), escritor
• Joan Ramis de Ayreflor (Ciutadella de Menorca 1881 - Palma 1956), periodista y poeta
• José María Tous y Maroto (Palma 1870-1949), poeta y dramaturgo
• Rubén Darío (Metapa, Nicaragua 1867 - León, Nicaragua 1917), poeta, diplomático y periodista
• Miquel dels Sants Oliver (Campanet 1864 - Barcelona 1920), escritor y periodista
• Santiago Rusiñol (Barcelona 1861 - Aranjuez, Madrid, 1931), pintor y escritor
• Miguel Costa i Llobera (Pollença 1854 - Palma 1922), poeta
En 1921 reuniría toda su producción poética en el volumen Poesías.
Algunos poemas -en catalán- de Alcover, en estos... enlace enlace
Joan Alcover moriría en Palma la noche del 25 de febrero de 1926 a causa de una pulmonía. El Ayuntamiento de Palma lo declaro hijo ilustre y el compositor Amadeo Vives compuso la música al poema «La balanguera». En 1996 el Consell de Mallorca declaro la composición -letra y música- el himno oficial de la isla de Mallorca.
La Balanguera (Español)
La Balanguera misteriosa,
como una araña de arte sutil,
vacía que vacía la rueca,
de nuestra vida saca el hilo.
Como una parca que bien cavila,
tejiendo la tela para el mañana.
La Balanguera hila, hila,
la Balanguera hilará.
Girando la vista hacia atrás
vigila las sombras del abolengo,
y de la nueva primavera
sabe donde se esconde la semilla.
Sabe que la cepa más trepa
cuanto más profundo puede arraigar.
La Balanguera hila, hila
la Balanguera hilará.
De tradiciones y de esperanzas
teje la bandera para la juventud
como quien hace un velo de bodas
con cabellos de oro y plata
de la infancia que trepa
de la vejez que se va
La Balanguera hila, hila,
la Balanguera hilará
La Balanguera misteriosa,
como una araña de arte sutil,
vacía que vacía la rueca,
de nuestra vida saca el hilo.
Como una parca que bien cavila,
tejiendo la tela para el mañana.
La Balanguera hila, hila,
la Balanguera hilará.
Girando la vista hacia atrás
vigila las sombras del abolengo,
y de la nueva primavera
sabe donde se esconde la semilla.
Sabe que la cepa más trepa
cuanto más profundo puede arraigar.
La Balanguera hila, hila
la Balanguera hilará.
De tradiciones y de esperanzas
teje la bandera para la juventud
como quien hace un velo de bodas
con cabellos de oro y plata
de la infancia que trepa
de la vejez que se va
La Balanguera hila, hila,
la Balanguera hilará
Cullons ¡¡¡¡ que buena entrada....¡¡ super interesante...molt bé ¡¡
ResponderEliminarLorenzo, creo que esas haciendo mucho por Mallorca y gracias a ti algunos la conocemos un poco más.
ResponderEliminarUn abrazo
Maravillosas aquellas tertulias en los salones y en los cafés. Ahora hacen las casas cada vez más pequeñas, y ya casi no queda sitio para el perro, así que imagínese para montar una tertulia. Y también aquellos viejos cafés van desapareciendo. Una lástima. Una desearía trasladarse a ese jardín.
ResponderEliminarFeliz puente
Bisous
Un gran hombre que logró modernizar la literatura en Mallorca, muy buenos enlaces así que las fotografías, desgraciadamente muchas contradicciones en el plan familiar, de perdidas de personas tan queridas.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz domingo
Hola Lorenzo:
ResponderEliminarUna biografía de un gran literato.
La política también me desencanta.
Saludos
DON MIGUEL:
ResponderEliminarMe satisface que te haya gustado.
Un saludo!
DOÑA ANA MANOTAS:
Muchas gracias por tus palabras. Siempre es bueno contribuir con la historia de donde uno vive. Me satisface descubrirte lugares y gente de mi tierra.
Un Abrazo.
LA DAME MASQUÉE:
Se ha perdido el noble entretenimiento de las tertulias. Si acaso en las radios, pero en estas, no tenemos voz ni voto. Y aquí en Palma ya no queda ningun café de aquellos donde pasar la tarde con tertulianos. Son los nuevos (y malos) tiempos.
Un beso.
DOÑA MARI-PI-R:
Si, el pobre Joan desarrollo desgraciadamente su mejor obra debido a los embates que le dio la vida. Por eso su poesia era tan sentida y triste.
Feliz domingo también en la lejana Canada.
DON MANUEL:
Me alegro que le haya gustado. Y Alcover no fue como los politicos de ahora, se fue como había entrado. Era todo un personaje.
Saludos y gracias.
Qué gran desgracia perder dos hijos el mismo día y en lugares diferentes. Seguro que sus poemas fueran en la lengua que fueran reflejarían ese pesar.
ResponderEliminarUn saludo.
Era la pura intelectualidad mallorquina, la renaixenca balear. Me ha gustado conocer la historia de este mallorquín singular y la cancion de la Balanguera, que había oído a Chenoa. Saludos, Lorenzo.
ResponderEliminarQue belleza de entrada...
ResponderEliminarTe felicito!!!!
Besitos en el alma
Scarlet2807
DESDE LA TERRAZA:
ResponderEliminarAsí es. Despues de aquello su poesia se volvio más triste y oscura. Visicitudes terribles fueron las que paso este hombre.
DON PACO:
ResponderEliminarMe satisface que le haya gustado.
Un saludo!
SCARLET2807:
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras.
Un beso para ti también.
Un gran elenco de intelectuales, no se reúnen por banalidades. Así que este mallorquín ilustre no era un cualquiera, a pesar de su triste vida...
ResponderEliminarUn saludo¡¡
No conocía a este personaje pleclaro de las letras mallorquinas. No sé qué tenían los hombres de aquellos tiempos que acaban siempre dedicándose a la política. En este caso, primero fue ésta y después la literaria, surgida, cómo no, al calor de las decepciones vitales.
ResponderEliminarSaludos